Behobia 2012: 1:18:21

12.11.2012. "Correr por amor propio trae consecuencias"

Peralta Atlético

Son las 6:15 de la mañana y suena el despertador, pero como "casi" siempre, ya estoy despierto. La noche no ha sido mala del todo y he podido descansar lo suficiente. Pese a estar en otra habitación Rafa se levanta de un salto en cuanto suena el despertador (este si que está nervioso) y después de un buen desayuno nos vamos a coger el autobús  De Peralta venía un autobús lleno con todos los runners del Peralta Atlético.
En el autobús lo de siempre, nervios, todo el mundo hablando de tiempos, poniendo escusas (que si no he entrenado, que he estado lesionado, que noche más mala, que catarro tengo,...) y todos con ganas de llegar.
Pero cuando llegamos nos encontramos el diluvio, que manera de llover, y nosotros nos tenemos que bajar del bus y cambiarnos en un porche del polígono... Por lo que toca estar una hora y media bajo la lluvia, muertos de frío y sin poder calentar, ya que era preferible estar bajo cubierto.
Pero entre echar un café, ir al servicio, comer algo y prepararnos, pronto se echa el tiempo encima y hay que ir hacia la salida. En la salida me meto debajo de un andamio (el que utilizan para la cámara de televisión) y ahí puedo estirar algo antes de salir. Me encuentro con mi amigo Nico, que aprovecha y se mete conmigo y estamos un rato hablando. Yo le digo que voy a intentar hacer 1:20 y si llego bien y sino pues me tendré que parar, y parece que se anima a salir conmigo...
En la salida, y pese a la lluvia, el ambiente es impresionante. La música a tope, el de la megafonía animando a todo el mundo, todos saltando, con ganas de salir, y se da la salida.
Nico y yo salimos juntos, al principio se va despacio, hay mucha gente y cuesta adelantar, de repente Nico me dice que es mejor por la acera, que hay que adelantar, y se va... se va... se va.... y ya no lo veo en toda la carrera. Yo tengo bastantes dudas del rendimiento que puedo dar, así que salgo tranquilo, sin estrés y sin intentar adelantar mucho, solamente ir cogiendo ritmo poco a poco. En un par de kms ya cojo mi ritmo, hay más espacios y empiezo a pasar a mucha gente. Voy bien, llueve, pero la temperatura es ideal para correr, no me cuesta ir rápido y voy todo el rato pasando a gente. En las subidas (que hay bastantes) me pongo algo más intenso y en las bajadas intento relajar.

En el km 9 o así recibo una visita, jejejeej. Alguien me toca por detrás, me vuelvo y es Javi (del Saltoki). No lo conocía en persona, pero habíamos quedado que me saludaba al adelantarme (da gusto conocer a un compañero en estas circunstancias, en carrera y haciendo lo que nos gusta). Me sorprendió que me adelantase tan pronto, ya que yo iba rápido, pero viendo su tiempo final no me extraña, 1:15 horas, ¡Enhorabuena!
Pronto llego al km 10 y veo que voy por debajo de 40 minutos, lo que quiere decir que tengo la esperanza de bajar de 1:20 horas. Tengo dudas, ya que las fuerzas empiezan a flojear, pero se que la segunda mitad del recorrido es algo más rápida, por lo que puedo hacerlo. Pronto empiezo a notar que las fuerzas me fallan, ya solo puedo pensar en seguir sufriendo, ya que voy en tiempo. Ahora es cuando hay que saber sufrir, cuando el cuerpo te dice que no puede más, es cuando entra a funcionar la cabeza. Voy animándome a mi mismo a seguir... ya no voy sorteando los charcos, ya me dan igual, me tomo un gel que parece que me da algo de energía.
Pasa algún km y voy cogiendo a gente, en el polígono industrial paso a la liebre de 1:20, lo que quería decir que iba por debajo de ese tiempo, voy bien, esto me anima, me ayuda a seguir sufriendo, voy al límite de mi pulso, pero pienso que puedo acabar. Estoy deseando de que llegue la subida a Miracruz ya que es la última dificultad antes de la meta. La hago muy tranquilo, siempre a pulso y sin cebarme con nadie. Arriba me noto muy justico de fuerzas (se nota que no tengo fondo), la bajada intento recuperar, pero noto un pequeño pinchazo en la parte trasera de la pierna, no me molesta mucho pero no me deja correr a tope... Intento no dar zancadas muy largas y ya llegando a la recta de meta me empieza a pasar mucha gente. Son todos los que iban con la liebre de 1:20 que se han adelantado porque van con fuerzas. Me da igual yo voy a tope y solo queda un km. Se me hace enterno, tengo ganas de parar y me duele todo... a 100 mts de la meta veo 1:19 en el reloj, ¡BIEN! ya bajo de 1:20, me dejo llevar ya no apriento, veo a mis padres y a mi hermana todo emocionados, bajo la lluvia y animando, eso sí que tiene mérito... ¡Gracias por vuestro incondicional apoyo!

Casi no se me ve.....

Y entro en meta, disfruto del momento, no me queda energía, pero estoy contento... paro el crono en 1:18 horas y voy sin poder andar hasta la recogida de la mochila. Estoy desecho, no puedo ni andar, y es que he corrido con todo menos con las piernas.

Y a partir de ahora, llega por lo que merece la pena hacer todos estos esfuerzos... El ratico en la ducha contando batallas, la cerveza de después, ya relajados, y sobre todo la comida y la sobremesa con los amigos, esto no se compra con dinero.

Aparejatas/Behobianos y amigos. Iroz es el fotógrafo oficial.

Resumen:
Las conclusiones que saco de este día son que, desisto de intentar hacer la maratón de San Sebastian, no tengo suficientes entrenamientos encima y 42 kms son palabras mayores. Que tengo que parar de correr por un tiempo, hasta que cure bien la Periostitis (aunque suponga no correr la San Silvestre de Funes). Y el lado positivo es, que tengo facilidad para correr rápido, en el último mes habré corrido 50 kms, y debería haber hecho cerca de 300 kms. Esto me anima para ver que puedo ir rápido, pero también me enseña que no se puede correr sin entrenar, sin tener base. Voy a tener dolor toda la semana, y seguramente me deje alguna secuela.

Mis tiempos

En cuanto a la Behobia, he sido muy regular en mis parciales. En los 5kms he corrido a 3:55 mi/km, del 5 al 10 a 4:01 min/km, del 10 al 15 a 3:53 min/km y del 15 al 20 a 3:51 min/km, de menos a más, pese a mi cansancio.