17.04.2011.Hoy a las 8:30 salgo puntual de casa para acudir a las gaseosas para entrenar. La primera sensación del cuerpo es de tener las piernas como una piedra después de la salida de ayer. Sorpresón, cuando al llegar al punto de encuentro está toda la "Peña Roya", peña ciclista de Caparroso, con muchos integrantes de Cadetes, Juveniles, algún veterano y coche de apoyo. Con este plan nos tiramos hacia Tudela (el botxorno así lo manda) con una grupeta de mas de 20 ciclistas. De camino a Valtierra parece que las aguas están bastante calmadas y se rueda a un ritmo bueno, pero llevadero y es que el cuerpo tiene que ir adaptándose. A la altura de Valtierra nos desviamos por la subida del pueblo para ver como están los ánimos de los chavales. Pronto se ve que están con ganas de revolver y en cuanto la carretera se vuelve algo exigente se poner a tirar y a atacar. Esta subida es bastante suave y se aguanta bien en grupo, por lo que seguimos todos juntos. Tras pasar Valtierra y Arguedas, Ricarte se marca una serie de 7kms (toda la recta de Arguedas) a un ritmo muy fuerte y exigente (parece que se recupera bien de los puertos de ayer), después le damos unos relevos hasta llegar a Tudela para que el ritmo no baje. En Tudela subimos por detrás de la catedral y de nuevo las jóvenes promesas empiezan a atacar y a saltar del grupo, menos mal que la subida es muy corta y arriba nos reagrupamos todos. Entre la parte veterana del grupo se empieza a ver que nos toca trabajar para que en las subidas se desmadren, por lo que empezamos a pensar en hacerles sufrir un poco. Aprovechamos un gran tirón de Ricarte para hacer un pequeño corte, en los que estamos Ricarte, Txuma, Merino, David, Pedro y Yo. En un despiste Ricarte se queda y empezamos a relevarnos para mantener un pulso con los de atrás. Enseguida nos damos cuenta de que atrás se están organizando y vienen a por nosotros, lo que nos hace tirar aun con mas fuerza. Pulso muy divertido el que mantenemos, en los que nunca los perdemos de vista y que nos hace exigirnos a los dos grupos. Por detrás parece que se van quedando sin fuerzas y tras 25 kms volvemos para reagruparnos todo el mundo. De ahí a casa pequeñas escaramuzas y apretones que hacen la jornada muy divertida. Tras acompañar a todo el mundo a Caparroso volvemos para casa y al paso por Funes decido subir para terminar el alto de Funes (que se pasa dos veces en la Master del día 7 de Mayo). Al final me he encontrado bastante bien, aunque el entreno de ayer se nota en la frescura de las piernas. Termino el entreno con un total de 141 kms en 4:30 horas y una frecuencia cardíaca media de 120 y una cadencia de 80.
Da gusto salir con la juventud y ver que no tienen miedo a nada, ni a atacar, ni a sufrir, ni a preparar batalla en cualquier lugar. Se nota que se divierten encima de una bici, y de eso es de lo que se trata.
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